Seguridad del Agua y del Saneamiento en el marco de la agenda de desarrollo sostenible.
Por Dra. Mirna Noemi Argueta Irias, Vicepresidenta Técnica de AIDIS
En ésta época en que temas como la seguridad ciudadana y la seguridad alimentaria están muy vigentes, considero que es necesario que hablemos de la “Seguridad Sanitaria del agua para consumo humano y de la Seguridad del Saneamiento”.
En muchos Países los temas de agua potable y saneamiento no aparecen entre las 5 prioridades de los gobiernos en sus planes de desarrollo, pese a que el agua apta para el consumo humano y el saneamiento seguro es un derecho humano contemplado en la constitución de varios países del continente americano. Todos y todas tenemos derecho a un servicio de agua y saneamiento que brinden privacidad, garanticen dignidad y seguridad y que sean físicamente accesibles y asequibles.
El agua y el saneamiento son importantes para garantizar la supervivencia infantil, menos diarreas, seguridad alimentaria, recreación y una mejor nutrición entre otros beneficios. En caso contrario, al no disponerse de agua y de saneamiento gestionados de forma segura se incrementa la mortalidad infantil, la contaminación ambiental, la desnutrición causada por parásitos y enfermedades de transmisión hídrica.
Los objetivos de desarrollo sostenible (ODS) incluyen lograr esta meta de agua y saneamiento seguro en nuestros hogares, en los establecimientos de salud y en los centros educativos. Para ello la Organización Mundial de la Salud (OMS) propone dos herramientas valiosas para mejorar la calidad de los servicios de agua potable y saneamiento.
Los Planes de Seguridad del Agua Resilientes al clima “PSA-RC” o Water Safety Plans “WSP” por sus siglas en Ingles) es una metodología que permite identificar y evaluar los Peligros y Riesgos asociados a las diferentes etapas del Sistema de Agua, es decir desde la cuenca al consumidor. Esta metodología permite cuidar de manera integral el sistema de agua. Se sostiene en componentes fundamentales, que están alineados a las metas de protección de la salud y deben ser supervisados a través de la vigilancia de los sistemas de abastecimiento de agua. Son el medio más eficaz para garantizar sistemáticamente la inocuidad del agua para consumo humano y proteger la salud pública. Es un componente clave del marco para la seguridad del agua de consumo humano. El objetivo principal de los PSA es gestionar adecuadamente todos riesgos en cada componente del sistema incorporando los conceptos relacionados con la variabilidad y cambio climático.
Los Planes de Seguridad del Saneamiento (PSS, Sanitation Safety Planning “SSP” por sus siglas en inglés), es un enfoque basado en la evaluación del riesgo paso a paso que puede ser aplicado a todo tipo de sistemas de saneamiento: distintos escenarios, entornos y recursos. Es aplicable a toda la cadena de los servicios de saneamiento, desde el inodoro, contención/almacenamiento, transporte, tratamiento y uso o disposición final. Y puede incluir la cadena de reúso, desde el almacenamiento, distribución, riego, cosecha, comercialización y consumo de los productos regados con aguas residuales tratadas. Los PSS corrigen los peligros que representa la descarga de aguas residuales en fuentes de agua, así como la inadecuada disposición de excretas.
Éstas herramientas debidamente aplicadas en los sistemas de agua potable y de saneamiento garantizarán la seguridad de ambos servicios a la población, implementándolas se logrará reducir la incidencia de enfermedades transmitidas por la vía hídrica, asegurando la salud y una mejor calidad de vida a nuestras poblaciones.
Se trata de “Cerrar el ciclo” para garantizar la seguridad sanitaria del suministro de agua y del saneamiento como lo muestra la figura a continuación:
Los PSA y los PSS son un “traje a la medida” de cada sistema de agua y de saneamiento, respectivamente. Ambos son valiosas herramientas para encontrar eslabones débiles en la cadena de suministro o de saneamiento y así gestionar adecuadamente los riesgos sanitarios.
Fuente: Portal SANEAS Online